sábado, 22 de agosto de 2009

MEDITACIÓN


Quiero poner azucenas en tus manos
con perfume de jazmín.
Quiero poner collares en tu pecho
de tiernos azahares;

Quiero dejarte una jarra
de agua limpia,
para que con un paño
saques el barro si acaso te cae.

Quiero entregarte un cristal en espejo,
para que nunca olvides mirarte;
esa hermosura, de la que no te das cuenta.
Lo que llevas por dentro, llena de gracia.

Quiero que tus pensamientos sean luminosos.
Ingresen en el ojo calmo de las estrellas.
Y en la bóveda inmensa de tu intimidad:
Los huracanes...sean vientos de verano.

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