Con un beso corto como el momento.
Testimonio de justicia y razón.
En juramento ofrenda el corazón
su pudor misterioso, su contento.
Brillantes los anillos amalgama
encienden en los ojos insaciables
cristales, rompiéndose en los afables.
Y la azucena de pasión derrama....
Quizá algún pecado queda escondido.
O piadosamente queda olvidado
huyendo del recuerdo que desalma;
De la vida que engaña. Del revestido.
Del camino hacia la nada. Lo andado.
¡En dónde empieza el cuerpo! ¡En dónde el alma!
Testimonio de justicia y razón.
En juramento ofrenda el corazón
su pudor misterioso, su contento.
Brillantes los anillos amalgama
encienden en los ojos insaciables
cristales, rompiéndose en los afables.
Y la azucena de pasión derrama....
Quizá algún pecado queda escondido.
O piadosamente queda olvidado
huyendo del recuerdo que desalma;
De la vida que engaña. Del revestido.
Del camino hacia la nada. Lo andado.
¡En dónde empieza el cuerpo! ¡En dónde el alma!
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